Identidades

Durante varios meses, trabajé junto a Ignacio Llamas en la construcción de la exposición Identidades, celebrada en el Museo Barjola de Gijón, del 17 de junio al 7 de septiembre de 2022.

Iniciamos el proyecto con las premisas de realizarlo desde el concepto y los planteamientos de la comunión artística. Mi papel en él era desempeñar la función de comisaria, y el de Ignacio Llamas el de artista. Esta labor se inició con la atenta y silenciosa escucha de lo que el artista quería expresar y de las obras, para comprender lo más a fondo posible a cada una de ellas. Escribía mis reflexiones particularizadas y también que surgían sobre el hilo invisible que las vinculaba entre sí y con el tema de la exposición. Entonces lo contrastaba con el artista que aportaba sus precisiones. Así fueron cobrando vida los textos del catálogo.

Tal y como requerían las premisas de la comunión, procuré estar atenta a las necesidades del artista y a las exigencias de la exposición. Sentí en todo momento que esta actitud, de acogida y respeto, fue recíproca. Sin imposiciones curatoriales ni caprichos de artista, el trabajo discurrió de un modo fluido.

El desarrollo del montaje es siempre un momento difícil, pues es cuando más dudas surgen sobre la planificación prevista, aquel en el que pueden surgir una infinidad de imprevistos, tanto de carácter endógeno como exógeno. Mi labor entonces fue desarrollada de modo totalmente presencial. Gestión y acompañamiento activos, atenta a cualquier contratiempo o necesidad que surgiera. Fue muy íntimo el ver cada una de las piezas y su ubicación juntos, de manera que, en diálogo con el espacio, in situ, ya no sobre un plano, estas pudieran dar lo mejor de sí mismas cuando llegara el tiempo de la contemplación del espectador.

Mi experiencia en proyectos realizados con este modo de trabajar es que se genera un vínculo personal muy fuerte en el que los egos se disuelven y la comprensión se fortalece si uno está dispuesto a perderlo todo.

Pilar Cabañas